martes, 24 de diciembre de 2013

POSTURA CLARA Y SIN CONTRADICCIONES

Por: Chato Wilbury

A veces publico en favor de la industria privada y a veces apoyando a las culturas tradicionales.

Es contradictorio? Pensemos por un momento en las empresas paraestatales. Pensemos en lo que era Concarril y Dina. Los lugareños de Cd Sahagún nos contarán cómo los sindicalizados sacaban componentes para venderlos por fuera.

También todos conocemos el descaro de Napoleón Gómez Urrutia, líder del sindicato minero, moviliza marchas y plantones según sus necesidades políticas. Napoleón es buscado por todas las entidades de justicia del mundo por sus descarados actos de lavado de dinero y malversación de fondos del sindicato minero. Por ahora está tranquilo porque la reforma laboral no tocó ni un pelo de la opacidad con la que maneja el sindicato y ni siquiera se aprobó el voto secreto de los sindicalizados. Pero esa es otra historia.

Mientras el ser humano sea ambicioso, como siempre lo será, no puede ser política pública el control de las empresas. Es regalarle el poder a los amigos de los gobernantes. Es crear un círculo vicioso pagado por el contribuyente.

Quieres ser maestro? O trabajar en Pemex? Tienes que juntar el dinero para la plaza, porque no entras por competencias, sino comprando el puesto. Qué calidad de servicio puede dar un empresa con semejantes ineficiencias?


Los sindicatos en las paraestatales,
sólo son clientelismo político, que
produce corruptos jeques, tan
descarados como Deschamps y Gómez Urrutia

Y LOS MAGNATES SON UN AMOR?

A principios del siglo XX, la corporación Coca-Cola establecía el precio de la caña de azúcar en latinoamérica. De hecho Cuba era prácticamente de su propiedad. Cuando Estados Unidos propició la independencia de Cuba en 1898, cumpliendo así la Doctrina Monroe y apuntando hacia su dichoso Destino Manifiesto, Estados Unidos redactó en la misma acta de independencia cubana, el derecho de mantener la base militar de Guantánamo, con el fin de proteger sus intereses ahí asentados. Finalmente Guantánamo se convertiría en el campo de concentración para los enemigos de Estados Unidos.

Para no ir tan lejos, las huelgas de Rio Blanco y Cananea propiciadas por los abusos de los empresarios extranjeros, fueron sofocadas asesinando a los obreros. Así sin más.


Y el capitalismo no se queda atrás

LO MALO ES EL MONOPOLIO

Como verán, los abusos de los grandes monopolios, sean del gobierno o de la empresa privada, sólo caen en el vicio y la explotación.

Cuando apoyo las reformas para que vengan grandes capitales privados, lo hago pensando no en el beneficio del petróleo mismo, sino en la cantidad de dinero que tienen que movilizar esas empresas en nuestro país.

Cuando llegue la Shell, con las uñas afiladas, por su puesto, va necesitar obreros. Y los obreros mexicanos salen más baratos que los extranjeros. También buscarán proveeduría, que empleará miles de manos mexicanas. Los extranjeros que vengan a trabajar y a dirigir la compañía, gastarán en turismo y consumirán. Además los extranjeros valoran mucho el arte indígena. Entre más nos visiten mejor.

Detonará la industria del turismo. Sus hijos estudiarán en escuelas mexicanas y nos haremos amigos de ellos, teniendo la puerta abierta a que algún día nos reciban en sus países. Todo ésto es a mediano plazo.

LO BUENO VIENE DESPUÉS

La única manera de evitar los abusos de los grandes monopolios es EDUCACIÓN.

Entre más leamos nuestra historia, más prevenidos estaremos contra los abusos. 

Las familias que trabajen de empleados o proveedores de la Chevron y la Texaco, tendrán estabilidad socioeconómica en su hogar para educar a sus hijos y eso traerá una generación de mexicanos educados en un ambiente de paz y estabilidad.

Serán una generación de mexicanos que no se dejarán llevar por modas ni consumismos. Leerán las etiquetas de los productos buscando apoyar a sus conacionales, y separarán la basura en orgánica e inorgánica. Haciendo de la nuestra una mejor sociedad.

Esas futuras generaciones, tendrán la imaginación despierta y serán empresarios. Generarán industria mexicana y tal vez algún día competirán con las trasnacionales, generando nuevamente el balance.

NO A LOS MONOPOLIOS, SÍ AL BALANCE

Por eso, bienvenida la industria privada, pero más bienvenida la cultura y la educación. Está de nuestro lado aprovechar la coyontura, si sólo dejamos que vengan esas empresas y que el gobierno mantenga corruptelas como los diputados plurinominales, mientras nosotros estamos viendo la novela y jugando en el nintendo, entonces sí estaremos condenados al entreguismo y la colonización imperialista. 

Pero noten que está en nuestras manos insistir a las futuras generaciones en la importancia del desarrollo cultural y científico. Qué tan importante es divulgar la cultura y la mentalidad crítica? No me hagan caso a mí. Mejor lean a alguien con más experiencia en invitar a la gente a cultivarse:



0 comentarios:

Publicar un comentario

Está configurado para que todos puedan comentar, pero si tienes problemas para hacerlo, ponte en contacto con grupodeimos@gmail.com